El programa escolar de consumo de frutas, hortalizas y leche en Castilla-La Mancha, pretende dar a conocer a los niños la actividad agraria y sus productos, y reconectarlos con la agricultura y la alimentación saludable, fomentado su curiosidad sobre conceptos como el comercio de proximidad, la agricultura ecológica, la producción sostenible o la lucha contra el desperdicio de alimentos.